Segundo foro del Diálogo Social

La OIT destaca a Uruguay por su política modélica de protección social

Pablo Casalí, especialista en seguridad social de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), participó en el segundo Foro del Diálogo Social. Destacó que Uruguay está en una posición privilegiada, no solo por el avance en cuanto a su sistema de protección social, sino por la voluntad política de elevar el tema en la agenda de las políticas públicas, además por la integración cuatripartita en el Banco de Previsión Social.

Pablo Casalí especialista en seguridad social de la OIT

En su intervención, Casalí presentó algunos puntos para acompañar la discusión de las mesas temáticas que continuarán a los foros temáticos.

Aseguró que el futuro del trabajo y cómo vincularlo con una protección social integral son de los más grandes desafíos que se presentan. Agregó que el mundo está influenciado por los cambios demográficos, transición hacia la sostenibilidad medioambiental, los procesos tecnológicos, organización de la producción y el trabajo, y el aumento de desigualdad (muchas veces exacerbada)

Además recordó que en el centenario de la OIT recientemente celebrado las directivas de dirección general de la Organización impulsan la concientización y el estudio de cuatro dimensiones: trabajo y sociedad, trabajo decente para todos, organización del trabajo y la producción y gobernanza del trabajo y del sistema de protección social.

Mencionó la importancia de reflexionar sobre las transformaciones e incidencia en la organización de la producción y el trabajo. Además puntualizó que actualmente se aceleran las innovaciones y aparecen nuevas tecnologías que traen la creación de nuevos empleos, y la sustitución de otros. Son formas atípicas, como el trabajo por cuenta propia, familiar, informal y tiempo parcial entre otros. Todos estos cambios impactan sobre el sistema de financiamiento y el desafío es como sostener los sistemas de protección social con estos cambios.

El especialista destacó que Uruguay está en una posición privilegiada, no solo por el avance en cuanto a su sistema de protección social, sino por la voluntad política de elevar el tema en la agenda de las políticas públicas, además por la integración cuatripartita en el Banco de Previsión Social.

“Es un orgullo para Uruguay ser exportador de experiencias y la OIT constantemente recibe consultas sobre la representación cuatripartita del BPS y qué mecanismos utiliza”, dijo.

"Cómo modernizar el componente contributivo es un gran desafío y Uruguay tiene una experiencia concreta al respecto, porque supo incluir a los trabajadores por cuenta propia de escasa o baja capacidad contributiva", agregó el jerarca.

Desde la OIT se piensa que el diálogo es una única oportunidad para determinar cuál será la matriz del financiamiento y el peso que tendrán las contribuciones en la protección social del futuro.

Con respecto al envejecimiento, dijo que se asocia a la crisis pero deber verse como nuevas oportunidades, siempre y cuando los países se anticipen a los procesos del envejecimiento.  En ese sentido, Uruguay dialoga sobre las mejores opciones para hacer frente a estos impactos que afectan la sostenibilidad del sistema.

Destacó los pasos firmes que ha dado el país hacia la promoción de los servicios esenciales de salud, también resaltó la vinculación de las prestaciones monetarias a la educación y salud, decisión pionera en la región y modelo sustentado y replicado por muchos países de la región y el mundo.

El jerarca dijo que la OIT detectó que muchos empleos comienzan a adquirir formas atípicas que se apartan de las generales y la pregunta es si será posible avanzar a protección social integral frente a las restricciones del nuevo escenario de desaceleración y los cambios en el mundo del trabajo que se están produciendo.

Casalí finalizó reiterando la importancia de reflexionar la protección social junto a las transformaciones del mundo del trabajo y comprometió a la  OIT a acompañar a Uruguay en este proceso.