Primera sesión anual

Consejo Nacional de Género presentará informe el 7 de marzo, en la víspera del Día Internacional de la Mujer

El Consejo Nacional de Género realizó la primera sesión anual con un balance sobre las fortalezas y desafíos para garantizar la equidad de género. El jueves 7 de marzo, previo al Día Internacional de la Mujer, presentará los resultados alcanzados durante el quinquenio, entre los que se encuentran avances normativos sobre violencia, trata y femicidios, así como la participación de la mujer en emprendimientos productivos.

El Consejo Nacional de Género es un espacio integrado por organismos del Estado, la academia y organizaciones de la sociedad civil. Su objetivo es diseñar y definir las líneas estratégicas de las políticas públicas en materia de género. La directora del Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres), Mariela Mazzotti, preside también este consejo, encargado de articular, coordinar y generar políticas interinstitucionales hacia la igualdad de género. Este espacio fue creado por la Ley de Igualdad de Oportunidades y Derechos, de 2007, y este viernes 22 de febrero realizó su primera sesión del año.

En esta oportunidad, el consejo realizó un balance de sus políticas, identificando fortalezas y desafíos para garantizar la equidad de género. Mazzotti aseguró que en el último año del período el desafío es alcanzar cambios necesarios hacia el derecho de las mujeres a vivir una vida libre de violencia, como un derecho humano universal.

Anunció que, de cara a la conmemoración del Día Internacional de la Mujer, que se celebra el 8 de marzo, el día 7 se presentarán los resultados de gestión del quinquenio. Indicó que el balance muestra que hubo un salto sustantivo en calidad sobre la comprensión del Estado uruguayo en cuanto a las políticas de igualdad de género, relacionado con las políticas de desarrollo del país.

“No hay políticas de desarrollo sustentables que evadan los problemas de desigualdad que siguen existiendo. Y las políticas de igualdad le corresponden a todo el Estado nacional, departamental y municipal”, subrayó.

En esa línea, destacó que durante los últimos años se avanzó en la generación de compromisos de los distintos organismos públicos y con algunas intendencias departamentales. Queda pendiente para el próximo quinquenio profundizar el compromiso de gobiernos departamentales y municipales.

También resaltó el compromiso de los ministerios de Ganadería y de Industria en el fomento del papel de la mujer en los emprendimientos productivos, ya sean urbanos o rurales. Destacó el avance, junto con el Ministerio de Educación y Cultura, el cual, por ejemplo, hoy abrió un curso semipresencial con más de 320 educadores de educación formal y no formal, sobre prevención de abuso sexual.

En materia normativa, Mazzotti agregó que hubo un fuerte progreso con políticas de estado, como las leyes contra la violencia de género hacia las mujeres, de lucha y combate a la trata de personas, de combate al femicidio, de las mujeres en el desarrollo, que promueve que los emprendimientos productivos, urbanos o rurales tengan igualdad de oportunidades para licitar en las compras públicas con ventajas para que compitan en mejores condiciones. Además, están a discusión parlamentaria la ley de igualdad y no discriminación de las mujeres, que se encuentra en la Cámara de Diputados, y la ley de cotitularidad de las tierras del Instituto Nacional de Colonización y de la titularidad compartida para las viviendas de ayuda mutua.

“Todo esto es producto del énfasis que los distintos jerarcas pusieron en el Consejo de Género para que luego los grupos de trabajo concretaran en programas interinstitucionales específicos”, enfatizó. Para el próximo consejo, que conformará el nuevo Gobierno, es importante asumir la idea de que la igualdad de género es una política de estado y se dé continuidad a las tareas que se vinieron realizando. Afirmó que si se aprueba la ley de igualdad y no discriminación de las mujeres, todos los organismos públicos tendrán unidades de género en el máximo nivel de jerarquía institucional y contarán con recursos propios.

También se formará un fondo concursable para proyectos de la sociedad civil que fomenten la participación social de organizaciones de mujeres rurales, mujeres de los barrios y afrodescendientes y se continuará trabajando en los puntos más débiles que aún existen, relacionados con el empleo, los ingresos de hombres y mujeres, la participación de las mujeres en la economía, además de continuar con la lucha contra la violencia de género.

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